¿Quién es “la procesionaria”?
La procesionaria del pino es un insecto de la familia de los lepidópteros. Recibe este nombre porque al abandonar el nido, antes de convertirse en mariposa, forma una procesión en fila india de más de 300 individuos.
Se las identifica fácilmente por sus grandes nidos de color blanco que cuelgan de las ramas de los pinos. Es en la primavera, cuando las orugas salen de estos nidos, para buscar en el suelo un lugar dónde enterrarse y formar la crisálida que dará lugar a la mariposa en el mes de julio.
Su cuerpo está cubierto de pelos urticantes que al entrar en contacto con la piel pueden causar una grave reacción irritante. Con un solo roce se puede llegar a producir un choque anafiláctico (grave reacción alérgica que puede llegar a obstruir las vías respiratorias del animal con el que entren en contacto).
¿Por qué son peligrosas para nuestras mascotas?
Únicamente el contacto con los pelos que desprenden y se quedan en el ambiente, pueden provocar inflamación y necrosis de la lengua y labios.
¿Qué síntomas veremos en el perro/gato?
Se rascará la boca desesperadamente, como si quisiera arrancarse algo. En ocasiones arrastran la cara por superficies rugosas. Es frecuente ver un babeo excesivo.
Se inflama la lengua, los labios, la glotis, el esófago y puede llegar a afectar hasta el estómago. Esta inflamación puede llegar a obstruir las vías respiratorias. Vemos que al animal le cuesta respirar. Hará respiraciones cortas y superficiales. Antes de llegar a este punto, es importante apresurarnos a llegar a un veterinario, puesto que las consecuencias pueden ser fatales.
La necrosis de la lengua se hace aparente en los días posteriores al contacto. La porción afectada adquiere un color oscuro y al final se desprende. En estos casos, desgraciadamente quedará una lengua más corta.
¿Puedo ayudarle de alguna forma? Primeros auxilios
¡¡¡Por supuesto!!! Lo ideal es localizar a tu veterinario para poder estabilizar al animal. Pero dado que esta “urgencia” se da cuando estamos paseando por el campo, podemos actuar de la siguiente manera:
Lavar la boca de la mascota con abundante agua templada porque el calor desactiva los agentes alérgicos de los pelos de la procesionaria. Hay que recordar que también afecta a las personas, por lo que para realizar esta acción es necesario usar guantes. Debemos intentar evitar que se rasque mucho la zona afectada y, posteriormente, debemos acudir lo más rápido posible al veterinario.
¿Cómo puedo prevenir el contacto?
La procesionaria pasa por varios estados de metamorfosis, aunque solo son peligrosas durante la fase de oruga. Os recomendamos estar alerta en las zonas habituales de vuestros paseos. Evitar los bosques de pinos.
A los propietarios de las mascotas que suelen engullir todo lo que encuentran a su paso, recomendamos se acerquen a nuestra clínica veterinaria Gous Gorraiz antes de realizar una excursión, para poder preparar un botiquín de actuación rápida y explicaros cómo usarlo.
Muchas gracias por seguirnos… y nos vemos pronto!
